miércoles, 10 de marzo de 2010

Mecanismo de un mechero, dos velocidades



Si, señoras y señores, mi experimento masculino ha surtido efecto. Me propuse confirmar la teoría del mechero. Si, una teoría por la cual demuestro que los hombres tienen el mecanismo de un mechero, dos velocidades simplemente. Cuando intentas encender la llama una y otra vez, una y otra vez, porque tienes mucho interés en encender tu cigarro, la piedra se gasta, y el mechero deja de funcionar. Si lanzas ese mechero al fondo de un cajón sin mas, y te olvidas de él, la siguiente vez que intentes encenderlo, lo hará a la primera. Pues ese es el experimento que he llevado a cabo con mi giputxi favorito. En noviembre, nos enrollamos locamente... yo me pillé, quise intentar algo más, pero el muchacho me dio una de cal y otra de arena (como dice Lady Choni) y me mando a tomar por el culo en menos tiempo que se dice ocho chinos frien tocino. Con mi corazon hecho pedazos y triturado por una minipimer de esas de hacer croquetas, estuve sin hablar con el , hasta que en navidad, me habló via messenger, para preguntarme que tal estaba y ponerle al dia de mi vida. ¿Qué como estoy? ¿Qué como me va? Si, si, vas listo chaval. Y ahí comenzó mi investigación, empecé a pasar de él mogollón, si me tiraba los trastos yo los esquivaba cual ninja de cinturon negro de peli japonesa, si me decia alguna burrada sexual, yo le soltaba mi charla sobre que ahora habia decidido tomarme un tiempo de celibato... y asi todo. Pues el muchacho, parece que ha despertado de su letargo anti-mi con mi táctica de contención. Hablando con él un día, le comenté que necesitaba las 6 temporadas de la serie Sexo en Nueva York, para hacer una cosa para la universidad. Él me dijo que las tenía, pero que no sabía donde y tenía que buscarlas. Días más tarde, la tarrina de dvds aun no había aparecido, y yo comencé a intentar bajarme los capítulos del emule. Pero, el jueves por la tarde, a eso de las seis, mientras yo montaba un reposapies en mi curro, vestida de uniforme, con coleta y pintas de loca, apareció mi giputxi cual principe chon. Llegó sonriendo, y yo solamente pude poner cara de panfila flipada. Me dio la tarrina de dvds, y me quede mas flipada aun. Habia hecho un camino de una hora en coche, desde Donosti, para venir a verme quince minutos, darme los dvds, y marcharse. Algo que nunca pense que fuera capaz de hacer. Y al marcharse, me regaló un beso de los de película, y tras eso, me dijo "ya me darás la recompensa". Desconcertante verdad? Me dejó tonta para todo el resto del día. Con esto demuestro mi teoría del mechero, facil, sencillo y para todas las chonis. Seguiré con mi táctica con el giputxi... me encanta ser maligna.

Este es un post que escribi en Febrero de 2008.... madre mia madre mia.... los post son como las fotos de hace años... pffff

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